Fin de semana en La Rioja

Hace unos días os contaba que pasamos un fin de semana en La Rioja, una escapada de otoño con motivo de mi cumpleaños. Hoy os cuento la pequeña ruta que seguimos para saborear esta bonita región.

Lo primero que hice cuando decidimos nuestro destino fue pedir consejillo a Mónica del El Taller de Las Cosas Bonitas, como buena riojana que es sabía que me diría cuales eran los lugares imperdibles cercanos a nuestro alojamiento en Cuzcurrita del Río Tirón, y vaya sí lo hizo. Como las cosas buenas hay que compartirlas, aquí os dejo con nuestra ruta!

Briones

Nuestra primera parada fue Briones, un pequeño pueblo con mucho encanto situado en lo alto de un cerro desde donde se pueden contemplar unas vistas fantásticas de los viñedos y paisajes riojanos. Parece que no haya pasado el tiempo por sus calles empedradas y tan bien conservadas.

Una de las cosas que más me gustó fueron sus balcones y ventanas con barrotes de forja decorados con flores, todo un contraste con los tonos marrones de sus puertas y fachadas.

Subimos por unas escalerillas de caracol hasta lo más alto de los restos de la antigua fortaleza (absternerse los que sufráis de vértigo) donde pudimos apreciar esta panorámica del pueblo, con la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción como principal protagonista. No puedo evitar fotografiar este tipo de perspectivas con el mosaico de tejados que forman las azoteas de las casas!

Mientras paseábamos por el pueblo nos topamos con un señor mayor que vendía nueces y tomates de huerto a las puertas de su casa. Nos conquistó su amabilidad y acabamos comprándole unos kilos cada cosa. Los de Madrid somos así, vemos tomates fuera de un supermercado y nos lanzamos a por ellos 🙂 y es que éstos son tomates que saben a tomates!

Muchas de las nueces no llegaron ni siquiera a casa, las comimos sentados en la plaza de Briones abriéndolas con una piedra. Delicias de otoño que me encantan!

Como curiosidad, la serie Gran Reserva se grabó en Briones, así que los seguidores de esta serie ya tenéis otra excusa más para visitarla.

San Vicente de la Sonsierra

Seguimos nuestro camino hasta San Vicente de la Sonsierra, a tan sólo unos minutos de Briones y también situada en lo alto de un cerro. Su vista de la fortaleza verdaderamente impresiona desde lo lejos.

Es un pueblo pequeño en el que destaca la fortaleza, el castillo y la iglesia románica de Santa María construida en lo más alto. Una maravilla contemplar desde aquí arriba el puente medieval por el que discurre el río Ebro, y todo su valle, que empezaba ya a teñirse de colores otoñales.

Hicimos un alto en el camino y nos fuimos a comer a Casalarreina, otro pueblito cercano, a un restaurante llamado La Vieja Bodega que nos recomendó Mónica. Fue todo un acierto, su comida es de primerísima calidad y muy muy rica. Fue una pre-celebración perfecta de mi cumple que culminamos con una tarta de manzana para chuparse los dedos!

Cuzcurrita del Río Tirón

Cuzcurrita del Río Tirón, a tan solo 3 horas de Madrid fue nuestro punto base. Nos alojamos en el Hotel Teatrisso un hotel rural muy especial, con una restauración de 10 inspirada en el cine y el teatro de los años 50 y llevada a cabo por sus propietarios, que por cierto fueron encantadores. El hotel cuenta también con su propia bodega para visitar y hacer una cata de vinos.

Cuzcurrita fue todo un descubrimiento, un pueblo pequeñito con gente amabilísima por cada esquina. De hecho bromeábamos diciendo que queríamos que nos adoptasen en él. Nos cautivó!

Después de la ruta de por la mañana decidimos pasar la tarde más relajadamente y que las niñas tuvieran su momento de diversión en el parque infantil que había a orillas del río. Pasamos una tarde muy familiar y muy divertida (bueno, menos cuando Olivia decidió tirar el chupete al río) 🙂

Laguardia

A la mañana siguiente pusimos rumbo a la Rioja Alavesa donde visitamos la bodega Eguren Ugarte para realizar la vendimia en familia que la que ya os hablé aquí.

Al terminar nos dirigimos a Laguardia, una ciudad amurallada con claros aires medievales. Estuvimos poco tiempo ya que nos tocaba regresar y empezó a llover, pero disfrutamos paseando por sus calles que olían a uva pisada, a vino y a leña.

Espero que hayáis disfrutado conmigo de esta escapada virtual y os haya podido transmitir un poco de lo que es visitar La Rioja en su época de mayor esplendor, en otoño. Es la segunda vez que la visitamos y seguro que no será la última!

Feliz día!

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Nuestro alojamiento fue el Hotel Teatrisso en Cuzcurrita de Río Tirón, un sitio super recomendable para pasar un fin de semana perfecto!