Callejeando por Venecia

Hace tan solo unas semanas volvimos a perdernos por Venecia. Tengo la suerte de que mi marido es de un pueblo veneciano, así que todos los años cumplimos con la visita de rigor al “pueblo” :-). Qué te voy a contar! No puedo quejarme de pueblo!

En esta ocasión no teníamos nada planeado. Simplemente quisimos pasear por sus callejones sin un rumbo fijo, visitando rincones menos conocidos y turísticos.

Nuestra visita coincidió con el puente de Mayo, que es festivo también en Italia, y había muchísima gente. Así que para evitar las multitudes buscamos una alternativa a las vías principales que te dirigen a Rialto y San Marco, y suelen estar bastante concurridas.

Lo bueno de Venecia es que en cada visita descubres lugares por donde nunca antes has pasado y mires por donde mires tiene su encanto. Viendo estas fotos podríais pensar que teníamos Venecia para nosotros solos, pero nada más lejos de la realidad.

El truco es alejarse de los lugares más turísticos.

Para Olivia esta era la primera vez que pisaba Venecia de verdad y fue muy divertido ver como gritaba “agua” mientras señalaba los canales. Como imaginarás no podíamos quitarle ojo de encima, es una pequeña temeraria que corría directamente hacia el agua.

Aún así creo que Venecia es uno de los mejores lugares para visitar con niños. Tendrás canales, pero no tienes que preocuparte de los coches y hay muchísimas plazas amplias donde pueden correr a sus anchas.

Y cuando se cansan de correr el portabebés es otro imprescindible, Venecia está repleta de puentes con escaleras.

Un lugar que no pudo faltar en nuestra visita a pesar de la multitud fue la Plaza de San Marco. Ver correr a las niñas detrás de las cientos de palomas no tiene precio, es ya todo un clásico cada vez que vamos.

Esta vez volvimos a comprar una careta para que Sofía la decorase, tal y como os contaba en el post sobre Venecia con niños, y la verdad que dio mucho juego para ambientar las fotos de la ciudad. Lo cierto es que esta máscara da un poco de miedito, no crees?

Acabamos el día en la zona de Le Zattere, en el quartiere de L´Academia. Un lugar menos transitado por turistas y donde se encuentran numerosos restaurantes y heladerías con vistas a la isla de la Judeca. Es una zona perfecta para pasear y ver partir a los inmensos cruceros que se despiden de Venecia.

Y a esta hora, al atardecer, es cuando se puede disfrutar de la otra Venecia. Sin cruceristas ni visitantes de un día, la que en el fondo todos buscamos…una Venecia para nosotros “solitos”.

Feliz semana a todos!!