El Hotelito, un hotel agro-chic a un paso de Madrid
Si buscas un lugar con encanto para una escapada corta desde Madrid, donde desconectar rodeado de naturaleza y saborear la rica gastronomía de Ávila…¡sigue leyendo!.
Hoy nos escapamos muy cerquita de Madrid, al pueblo abulense de Navaluenga y más concretamente a El Hotelito, un hotel “agro chic” decorado con muchísimo gusto y del que regresarás a casa con una sonrisa de oreja a oreja. ¿Te apetece descubrirlo?.
Buscando lugares para una escapada de fin de semana cerca de Madrid encontré El Hotelito. Está situado en Navaluenga, un bonito pueblo en una zona natural rodeado de pantanos y piscinas naturales a los pies de la Sierra de Gredos.
Me llamó mucho la atención el estilo del edificio: moderno y de líneas sencillas. Nada que ver con la mayoría de casas u hoteles rurales que suelen estar albergados en casas tradicionales y de estilo rústico.
El Hotelito forma parte de la selección de pequeños hoteles con encanto de Ruralka, y es que vayamos donde vayamos acertamos con todos. Como digo siempre, es una forma de facilitarte la búsqueda y garantizar unos estándares de calidad. Es mi punto de partida a la hora de buscar alojamientos rurales.
El interior, también de líneas muy sencillas con techos altísimos, paredes blancas y suelos de cemento pulido estaba decorado hasta el mínimo detalle con ese estilo “agro-chic”.
Al entrar a nuestra habitación nos quedamos boquiabiertos viendo el enorme ventanal con vistas a la montaña. Cándido, el dueño, nos explicó que en lugar de colgar cuadros en las paredes prefirieron hacer ventanas, porque… ¿qué mejor cuadro que estas estampas naturales, verdad?. ¡Estoy muy de acuerdo!.
La habitación además era enorme, con una cama muy amplia y comodísima para nosotros y dos camas supletorias para las niñas. Estos detalles y otros como un el tener un escalón para niños en el baño hace que sea un lugar perfecto para familias. ¡nos encantó!.
Las zonas comunes de El Hotelito eran igual o incluso más bonitas. Amplios ventanales que daban un montón de luz al interior y una decoración muy chula y actual con textiles africanos y toques rústicos como los taburetes de troncos. Había además una gran librería con una amplia selección de libros y revistas tanto para mayores como pequeños, juegos de mesa y DVD´s que podías tomar prestados para ver en la habitación.
La verdad es que nos supo a gloria volver de nuestra caminata por el bosque cuando empezó a llover, llegar al calor de la chimenea y disfrutar de unos minutillos de tranquilidad antes de la cena. Si tienes niños pequeños sabrás que estos momentos se cuentan con los dedos de las manos, y sientan mejor que una sesión de spa jaja!.
Y hablando de cena, esa noche habían preparado un estofado de ternera que estaba ESPECTACULAR!!. Recomiendo que te quedes a cenar y probar su cocina, ¡todo realmente delicioso!.
Pero el que fue sin duda el momentazo del día para las niñas fue la visita al Club Hípico, que está justo al lado del hotel y que gestiona el hijo de Cándido. Estuvimos acariciando los caballos, que no podían ser más bonitos y estar mejor cuidados. Jugaron con los perros de la familia y hasta recogieron huevos de gallinas.
Y aunque nosotros no tenemos mascotas, Cándido nos dijo que en El Hotelito aceptan todo tipo de animales, ¡desde un canario hasta un caballo!. Que yo sé que a veces es complicado encontrar lugares bonitos y que sean compatibles con todos los miembros de la familia. 🙂
Navaluenga es un lugar genial para ir en verano. Hay una zona de merenderos justo al lado del puente románico donde además te puedes pegar un chapuzón en aguas del Alberche (fresquita, ¡eso sí!), y si te entra sed puedes ir a tomar algo en cualquiera de sus cincuenta bares. ¡Si! ¡cincuenta!, ¡como lo oyes!.
O si planeas escapada en otoño el precioso Castañar de El Tiemblo está a un paso. También la zona de embalses como el del Burguillo, es un entorno natural increíble.
Lo dicho, una delicia haber descubierto un poco más esta zona tan próxima a Madrid.
Aunque cortita, fue una estancia estupenda, de las que te dejan con ganas de más. Estoy segura que volveremos muy pronto por aquí. ¡Ha sido un gran descubrimiento!, y lo tenemos prácticamente al lado.
Ah! Y se me olvidaba añadir que comer unas deliciosas patatas machaconas son parte fundamental para que el plan sea redondo ;-).
Feliz día a todos!!
Natalia
Ohhh es mi pueblo!!! 😍
Una madre genial
Buenos días!!
Yo sigo apuntando tus destinos porque en breve, cuando la peque crezca un poco, queremos hacer rutas turísticas, como estas.
Genial post como siempre!!
Beatriz
Esta zona de Madrid es preciosa Clara, madre paso gran parte de su juventud acudiendo al Tiemblo con su panda de amigos de acampada. No conocía este alojamiento, pero me lo apunto y más ahora que tenemos a Sinatra, por que estamos loquitos por poder salir de escapada con el.
Las fotos como siempre pura inspiración
😊😘