Burdeos: Guía imprescindible para ir con (o sin) niños

Burdeos, también denominada la pequeña París, es una ciudad perfecta para escaparte un fin de semana o un puente. Un centro histórico Patrimonio de la Humanidad, rica gastronomía, buenos vinos, y planes muy kid-friendly te esperan!. ¿Vienes a descubrirla?.

A continuación te cuento nuestra experiencia visitando esta bella ciudad francesa y algunas recomendaciones si la visitas con (o sin) niños.

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Burdeos hasta hace poco había sido una gran desconocida para mí. No sé porqué creía que estaba más lejos o que no era tan bonita. ¡Error!. Gracias a mi amiga Cristina Ferrer, que la visitó el pasado verano y me habló maravillas de ella, la puse en la lista de destinos perfectos para un puente.

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Y así es como nos animamos a ir en el Puente de Diciembre. Un total de 4 noches fueron más que suficientes para descubrir el encanto de esta bonita ciudad francesa.

Cómo llegar a Burdeos 

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Nosotros fuimos en coche. Desde Madrid son unas 7 horas, y al ser el trayecto por autovía es un viaje bastante cómodo. Además siempre aprovechamos estos viajes largos para hacer alguna parada de un par de horas para comer, estirar las piernas y ¡conocer pueblitos!. A la ida paramos en Hondarribia y a la vuelta en Olite. ¡Ambos super recomendables!.

Ir en coche tiene la ventaja de que luego podrás moverte fácilmente y conocer la zona que rodea Burdeos. Las excursiones a Saint Emilion y la Duna du Pilat son imprescindibles si tienes tiempo.

Y si prefieres viajar en avión, el aeropuerto de Burdeos está a tan solo 10km de la ciudad.

Donde alojarse en Burdeos

No sé si es porque viajamos en Diciembre, pero Burdeos me pareció una ciudad bastante económica para alojarte. Como en otras grandes ciudades hay opciones de todo tipo.

Nosotros en esta ocasión elegimos un apartamento con Airbnb. En general los Airbnb que vi estaban bastante bien decorados y a precios muy competitivos, incluso reservando con poca antelación.

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Elegimos un modesto duplexcon decoración retro en el barrio de Chartrons. Una zona tranquila a un par de kilómetros del centro, pero muy bien comunicado con el tranvía. Además en esa zona se podía aparcar el coche sin problema, y sin coste!.

Como moverse por Burdeos

Burdeos es una ciudad perfecta para caminar. No es excesivamente grande, es llana y su casco antiguo está peatonalizado casi por completo.

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Si necesitas usar transporte público, el tranvía es la mejor opción!. Es sencillo y muy cómodo si viajas con niños. También puedes coger la lanzadera fluvial para cruzar las dos orillas del río, a la vez que disfrutas de unas vistas únicas de la ciudad.

Que ver y hacer en Burdeos

1. Caminar por su centro histórico, Patrimonio Mundial

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Como te decía anteriormente, Burdeos cuenta con uno de los centros históricos más peatonizados de toda Europa. No solo eso, también figura en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO ya que la mayor parte de sus edificios aún conservan la estética característica del siglo XVIII.

Pasear sin un rumbo fijo por el centro de Burdeos es lo primero que debes hacer cuando llegues. Empaparte del encanto de sus plazas y sus fachadas; admirar sus iglesias (nada que envidiar a la Notre Dame de Paris) y las bellas puertas medievales defensivas, como la Grosse Cloche en el barrio de Saint-Paul. Y si subes a la torre de Ley-Bertrand, el campanario separado de la catedral, tendrás Burdeos a vista de pájaro.

Burdeos cuenta también con la calle comercial peatonal más grande de toda Europa, la Rue Sainte-Catherine. Aunque pasear por ella quizás sea perjudicial para tu bolsillo! ;-).

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Paseando por su centro histórico descubrirás también tiendas que parecen verdaderas obras de arte y que llamarán la atención de los más pequeños. Como esta juguetería en la Rue du Pas-Saint-Georges. En esta misma calle hay otra juguetería, Le Petit Souk donde querrán (y tú también) llevárselo todo.

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2. Encontrar tesoros en los anticuarios

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Francia es sinónimo de brocantes y ferias de antigüedades donde se pueden encontrar verdaderas maravillas. Nosotros tuvimos la suerte de coincidir con la Brocante des Quinconces, que se celebra dos veces al año en la Esplanada des Quinconces.

Allí te puedes pasar horas de puesto en puesto curioseando entre muebles y objetos antiguos. Aunque no compramos nada, me encantó tocar y ver de cerca algunos objetos curiosisimos.

Si buscas antigüedades pero no coincide con la feria; tendrás que dirigirte a la Rue Notre Dame, que junto con las calles adyacentes, es donde se encuentran los anticuarios de la ciudad. Además esta calle tiene mucho encanto, está llena de cafeterias y tiendas bonitas.

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3. Probar las ostras de Arcachon en el Mercado des Capucins

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Aunque estos moluscos no sean tu devoción, no puedes marcharte de Burdeos sin probar las famosas ostras de Arcachon. ¡Es toda una experiencia bordolesa!. Yo pensaba que no me gustaban las ostras, hasta que comí éstas. ¡Estaban deliciosas!.

El mejor sitio para comerlas es sin duda en el Marché des Capuchins, los sábados por la mañana. En un pequeño bar en medio del mercado sirven ostras fresquísimas acompañadas de un vaso de vino blanco por tan solo 7€.  Quizás no sea el lugar más bonito (o climatizado – en Diciembre hacía bastante frío jeje) de Burdeos para comer ostras, pero sí el más barato. Y te aseguro que además están buenísimas.

Luego puedes aprovechar la visita al mercado para comprar delicatessen como foie, quesos y embutidos para hacer un picnic.

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4. Visitar el Proyecto Darwin, la zona más cool de la ciudad

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Cruzando al margen derecho del río Garona llegarás al barrio de moda de Burdeos. Aquí encontrarás un multiespacio sostenible y ecológico llamado Proyecto Darwin, un sitio que gustará a grandes y pequeños.

Cuenta con una zona de co-working, granja urbana, skatepark y un restaurante – tienda de productos orgánicos, entre otras muchas cosas. Es perfecto para ir con niños ya que dentro del restaurante hay una zona dedicada para ellos. Un tipi gigante lleno de peluches y juguetes.

Y si les gusta el skate, alucinarán viendo las piruetas de los que allí lo practican. ¡Nos encantó!.

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5. Refrescarte en el Espejo de Agua

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Una de las estampas más reconocibles de Burdeos es la Plaza de la Bolsa y su Espejo de Agua. Una increíble “piscina urbana” en cuya agua se refleja los majestuosos edificios, y donde en verano los niños se pueden remojar.

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Una pena que no pudimos disfrutarlo, pero imagino lo divertido que debe ser chapotear con estas vistas!.

6. Patinar a orillas del río Garona

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Un paseo por los muelles de Burdeos es imprescindible para tener una perspectiva diferente de la ciudad. Un largo paseo que los peques podrán hacer caminando, en patinete o en bici. Al lo largo de esta orilla encontrarás numerosos espacios verdes (para hacer picnic en verano es ideal), zonas de juego y skate, y un mercado cada domingo por la mañana.

Si lo haces a ultima hora de la tarde además te recrearás con los colores del atardecer sobre una bonita vista de Burdeos.

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7. Descansar y jugar en el Jardín Público

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El Jardin Public en la calle Cours de Verdun es el lugar idóneo para que los niños tengan su momento de diversión, y para retomar fuerzas después de un largo día de turisteo.

Todo un pulmón verde para la ciudad. En estos bonitos jardines encontrarás un parque infantil con un enorme barco de madera y muchos columpios. También hay un clásico carrusel y el famoso teatro de marionetas Guignol Guérin.

Tanto si viajas con niños como si no, debes visitarlo, sobre todo en otoño donde las hojas de sus arboles centenarios se tiñen de bonitos colores ocres y anaranjados.

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8. Acabar el día con un buen queso, una copa de vino y un canelé

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Burdeos y sus alrededores es sinónimo de buen vino. Así que en el plan no puede faltar una cena a base de quesos franceses y una copa de vino en Aux Quatre Coins du Vin.

Y si quieres aprender más sobre este caldo entonces te encantará la visita a la Cité du Vin, una infraestructura cultural dedicada al vino. El edificio es realmente espectacular.

Para los niños, le canelé. Unos pastelitos caramelizados muy típicos de la pastelería bordolesa.

Y por último, una excursión al vecino y precioso pueblo de Saint-Emilion es imprescindible. En este post tienes todos los detalles.


Espero que hayas disfrutado de este viaje virtual por Burdeos, estoy segura de que repetiremos, pero esta vez en verano para disfrutar a lo grande de esta bonita ciudad!.

Y tú, ¿te habías planteado Burdeos como un destino para una próxima escapada?

Feliz día!

PINEA PARA MAS TARDE
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