24 hrs en Nápoles: Que ver y hacer
Sucia, ruidosa, caótica, peligrosa…Estos son algunos de los adjetivos más comunes que escucharás al hablar de Nápoles. Te recomiendo deshacerte de prejuicios, ya que te perderías una de las ciudades más auténticas de Europa. A continuación te descubro el encanto de la ciudad sin ley.
Sucia, ruidosa, caótica, peligrosa…Son algunos de los adjetivos más comunes que definen a Nápoles. Y en cierta medida así es. No voy a negarlo.
En algunos barrios caminarás entre basura esparcida por el suelo. El claxon de las motos y coches es incesante durante todo el día. El tráfico y la forma de conducir de los napolitanos es más similar a una ciudad asiática que a una ciudad europea. Y en algunos barrios puedes sentir inseguridad.
¿Y entonces? Te preguntarás… ¿Quien quiere ir a Nápoles?
Pues curiosamente, y sin saber muy bien porqué, se acaba viendo el encanto de todo esto. De su decadencia extrema, de su bullicio, de la forma de vivir de los napolitanos, y sobre todo, de su gastronomía!
¡Ay Nápoles! Esa ciudad que no deja indiferente a nadie, tanto para lo bueno como para lo malo. Recomiendo dejar los prejuicios a un lado para poder entenderla, y casi seguro que acabarás disfrutándola.
Qué ver y hacer en Nápoles
Nápoles no entraba en nuestros planes como destino en sí. Pero es la puerta de entrada a destinos muy apetecibles como Procida, Pompeya o la costa Amalfitana. Y ya que por logística pasábamos una noche en Nápoles, decidimos que era la oportunidad perfecta para conocerla.
Aquí te cuento que ver y hacer en Nápoles en un día.
¿Es Nápoles peligrosa?
Siempre había asociado Nápoles con ser una ciudad peligrosa, sucia y caótica. Pero antes de visitarla quise dejar los prejuicios a un lado y mirarla de otra manera. Eso sí, tomamos algunas precauciones como evitar ir con joyas u objetos de valor; no llevar la cámara colgada al cuello; y vigilar siempre bien nuestras pertenencias. Quizás algo más de lo que haría en otra ciudad europea.
En la estación de Napoli Garibaldi, en el andén para subir al tren de la Circumvesuviana a Sorrento vimos varías carteristas al acecho. Así que hay que ir con ojo, sobre todo en zonas de multitudes como la estación y alrededores. Al igual que harías en cualquier otra ciudad grande.
Aunque salimos a cenar un par de noches evitamos también las calles más estrechas u oscuras y nos mantuvimos en vías principales; y la verdad que sin problema. No sentimos inseguridad en ningún momento.
Si viajas con tu propio coche hasta Nápoles o vas con un coche de alquiler es más que recomendable meterlo en un parking vigilado. Por lo visto es bastante común el robo de coches de alquiler en la vía pública.
La vita napoletana
Al principio te chocará ver ropa tendida de un lado al otro de la calle; tres personas subidas a una moto, y sin casco!; pequeños altares improvisados a vírgenes, santos o difuntos en las esquinas; esa pasión desmedida por el fútbol; o cómo los napolitanos en definitiva hacen “vida de pueblo” en pleno centro de la ciudad. Sobre todo porque Nápoles es la tercera ciudad más grande de Italia.
Esta vida a la napoletana es incluso más palpable en el Quartieri Spagnoli, una zona muy animada y característica de Nápoles. Te aconsejo visitarla y caminar por sus cuestas y observar cómo viven los locales. De verdad que es muy curioso!!. Eso sí, es preferible hacerlo de día.
También merece la pena pasearse por algún mercado callejero como el de Porta Nolana o La Pignasecca, el más antiguo de la ciudad.
Lo cierto es que al cabo de un rato empiezas a ver encanto en esa decadencia; y en esa forma de vivir tan humilde y tan quizás diferente a los “cánones europeos”.
Que ver en Nápoles
Durante nuestra corta visita nos centramos más en callejear y pasear, en lugar de hacer visitas turísticas. Pero Nápoles alberga verdaderas joyas como el Museo Arqueológico Nacional. Si lo tuyo es la historia y la arqueología en este museo encontrarás una enorme colección de frescos y objetos de Pompeya y Herculea.
Otros imprescindibles para visitar son la Piazza del Plebiscito, la Galleria Umberto I el Castel Novo y el Duomo.
La gastronomía napolitana
Comer en Nápoles es sin duda uno de los mejores planes que puedes hacer. ¡La pizza aquí es famosa mundialmente y te prometo que no hay nada igual!. Sin duda es la mejor pizza del mundo. Finísima en la base y esponjosa en los bordes; y con unos ingredientes sencillos pero de calidad.
Cerca del centro histórico se localizan la mayoría de pizzerías antiguas de la ciudad. Entre ellas la famosa Da Michele, donde solo sirven tres tipos de pizzas (marinara, margarita y napolitana) a un precio baratísimo y con colas cada tarde. Nosotros la encontramos cerrada el domingo y fuimos a una que había enfrente: Pizzería D’Angeli y la verdad que salimos encantados.
Tampoco puedes dejar de probar la pasta y la mozzarella de bufala; y los famosos babá, unos bollitos mojados en ron o limoncello…¡mmm deliciosos!.
Y como no, para acabar siempre un buen café y un limoncello de Sorrento. Sin duda, saldrás rodando.
En el Quartiere Spagnolo comimos en un pequeño restaurante familiar llamado Antica Capri y lo recomiendo muchísimo. ¡Estaba todo delicioso!.
Nápoles con niños
Aunque fuimos sin niñas esta vez, siempre me fijo en otras familias o presto atención a cosas que puedan ser de interés si volviera con las niñas.
Lo cierto es que Nápoles no me ha parecido la ciudad más fácil para visitar con niños, y menos aún si tienes que llevar carrito. Las aceras para los peatones son casi inexistentes en muchos sitios, lo que hace que tengas que esquivar coches y motos a la vez.
No vi ningún parque infantil en el centro histórico, aunque sí nos topamos con el Hospital de Muñecas (Ospedale delle Bambole). Desde 1800 reparan los juguetes y muñecas, es curioso de visitar.
Y a su favor diré que la comida en Nápoles les encantará.
Donde alojarse en Nápoles
Por ubicación y relación calidad/precio nos alojamos en el B&B Hotel Napoli, una cadena de hoteles básicos pero funcionales que puedes encontrar en muchas ciudades europeas.
Aunque su ubicación no sea la más bonita, en la Piazza Garibaldi, estaba muy cerca de la estación de tren para coger el tren de la línea Circumvesuviana que te lleva hasta Sorrento; y también para coger el autobús hasta el aeropuerto. Tenía además una terraza en la azotea con vistas muy chulas a la ciudad y al Vesuvio!.
Como llegar del aeropuerto al centro de Nápoles
Nosotros volamos de Madrid a Nápoles con Iberia España
- En autobús: El autobús lanzadera llamado Alibus para en la Stazione Centrale (Piazza Garibaldi) y continúa hasta el puerto; primero para en Porto di Massa y continúa a Molo Beverello. Cuesta 5€ y tiene una frecuencia de unos 30 min. Aquí puedes ver los horarios.
- En taxi: Cuesta alrededor de 20€ para llegar al centro.
Y hasta aquí este corto pero animado paseo por Nápoles. ¿Has estado en Nápoles? Si nunca has estado, ¿cómo te lo imaginabas?. Seguro que si te animas a visitarlo volverás encantado como nosotros!
Otros posts que te ayudarán a planificar tu viaje:
Rocío
Pero que bien me viene tu post de hoy. Vamos en mayo una semana con los niños a Nápoles y la costa Amalfitana. Por supuesto visitaremos Procida, quedé enamorada con tu post.
Mil gracias por todas las recomendaciones
clarabmartin
Que bien!! Para mí Procida fue una joya!! Te encantará!!
Ari
¡Madre mía, Clara!
Yo estuve hace unos años y salí espantada…tengo que decir que iba con niños pequeños y carrito incluido (recuerdo que los coches no paraban de pitar, la basura esparcida por los suelos, era como si hubiese entrado en un caos total, jaja). En fin, imagino que llevaba una idea equivocada de lo que era la ciudad y añadiendo que iba con un bebé y dos niños me sentí un poco incómoda, pero…. ahora que veo tus fotos ¡hasta me han entrado ganas de volver!
Son preciosas y muestran el encanto que esconde Nápoles.
¡Me chiflan!
clarabmartin
jaja! Bueno la verdad es que ir con carrito y niños a Nápoles es para valientes, sobre todo porque las aceras son más bien inexistentes en muchos sitios. Pero sí, fotogénica es un rato!! Un beso!